Asistencia al Citi Field de los Mets muestran la insatisfacción de sus fanáticos

Los fanáticos de los Mets de Nueva York mostraron su insatisfacción con el equipo en 2018 al no presentarse al Citi Field.

En 2018, los Mets de Nueva York vendieron 2.224.995 boletos. El total fue menos de 200.00 de los que vendieron en 2017 y muy por debajo de las ventas en la temporada 2015 y 2016.

Es comprensible que así sea. Los Mets de 2015 y 2016 fueron a la postemporada. En 2017, había esperanzas de que volverían y una buena parte de esas entradas se vendieron antes de que todo se estrellara y se quemara.

Las expectativas volvieron a ser altas en 2018, pero un miserable comienzo de verano eliminó cualquiera de esas ventas de boletos adicionales para la última parte del año. Los aficionados dejaron de aparecer cuando el banderín estaba fuera de alcance. Hicieron lo que tenían que hacer para mostrar a la oficina principal que estaban insatisfechos con los resultados obtenidos en el terreno de juego.

A diferencia de años anteriores, creo que el disgusto con la temporada 2018 tuvo mucho más que ver con la administración que con los jugadores reales. Las malas decisiones en la temporada baja dieron como resultado el final por debajo de .500

La belleza de la temporada 2018 es que los fanáticos se quedaron con los jugadores. Los 25 hombres tuvieron apoyo de los asistentes. Sin embargo, al final, muchos parecían pensar que la mejor manera de apoyarlos era mirar desde casa.

Lo fanáticos inteligentes sabían que la única forma de hacer que cambiaran sus formas era golearlos donde les dolía: en sus cuentas bancarias.

Al no gastar dinero en el equipo, los fanáticos hicieron mella. Si bien no creo que sea suficiente para causar un cambio importante, es un buen mensaje para los responsables. Asientos vacíos en un mercado importante como Nueva York es una vergüenza. Tal vez, con un poco de suerte, los propietarios se sientan lo suficientemente avergonzados como para evitar que esto continúe.

Los números de asistencia dieron otro paso hacia atrás, terminando en el medio del grupo entre los 30 equipos de la MLB. En casi cualquier otra ciudad, esto sería aceptable. Para Nueva York, es vergonzoso.

Solo si los Mets construyen un equipo de calibre de campeonato, los fanáticos de los Mets regresarán una vez más al Citi Field.